El mercado mundial de teléfonos inteligentes envió un total de 1,35 millones de dispositivos el año pasado, lo que representa un crecimiento interanual del 7% y cercano al nivel anterior a Covid 2019, cuando los fabricantes enviaron 1,37 millones de teléfonos inteligentes. El primer lugar lo defendió una vez más Samsung, que vendió 274,5 millones de teléfonos inteligentes y cuya cuota de mercado alcanzó (como el año anterior) el 20%. Así lo informó la empresa analítica Canalys.
Terminó en segundo lugar con 230 millones de teléfonos inteligentes enviados y una cuota de mercado del 17%. Apple (registró un crecimiento interanual del 11%), en tercer lugar quedó Xiaomi, que entregó 191,2 millones de teléfonos inteligentes al mercado y ahora posee una cuota del 14% (crecimiento interanual de un alto 28%).
El primer puesto "sin medalla" lo ocuparon 145,1 millones de teléfonos inteligentes entregados y una cuota del 11% por Oppo (mostró un crecimiento interanual del 22%). El top cinco de los principales actores "telefónicos" lo completa otra empresa china, Vivo, que vendió 129,9 millones de teléfonos inteligentes y ahora tiene una cuota del 10% (un crecimiento interanual del 15%).
Según los analistas de Canalys, los principales impulsores del crecimiento fueron los segmentos presupuestarios de la región Asia-Pacífico, África, América del Sur y Oriente Medio. La demanda también fue fuerte para los dispositivos de alta gama de Samsung y Apple: el primero cumplió su objetivo de vender 8 millones de "rompecabezas" y el segundo registró el cuarto trimestre más sólido de cualquier marca con 82,7 millones de envíos. Canalys predice que el sólido crecimiento del mercado de teléfonos inteligentes continuará también este año.